Aarón Enrique Pérez Durán
Cronista del Municipio de Campeche
Hoy es 24 de junio, día de San Juan, día en que los campechanos celebraban, hasta cerca de los años setenta del siglo pasado, el tradicional voltejeo.
El voltejeo fue una las fiestas más representativas de la ciudad de Campeche, surgida a principios del siglo XVIII; era en esencia la fiesta del mar y se tomaban dos fechas para celebrarla: el 24 de junio, día de San Juan y el 29 de junio, día de San Pedro y San Pablo.
Aquella fiesta del voltejeo de San Juan, cuando el mar llegada a las orillas de las murallas, la gente salía a pasear de lienzo en lienzo, con música de charanga, luciendo los elegantísimos trajes de la mujer campechana y los cayucos del pámpano fresco se adornaban de banderitas multicolores y a reventar salían para los paseos de la bahía, de punta a punta.
Las murallas presentaban el aspecto de una verdadera romería; tocaban la música en los baluartes donde se hacían disparos de cañón y el ambiente de fiesta se dejaba llegar hasta los barrios de la ciudad, cómo el caso del barrio de San Francisco. Donde ahora se localiza el Casino de Campeche, se encontraba ahí el rastro público de la ciudad; era ahí donde los abastecedores y pescadores celebran la fiesta de San Juan. La música estaba a cargo de las orquestas de Pepe “El Muerto”, la del “Mocho Ríos” y de Manuel Ortiz. Los concurrentes degustaban tomando la cerveza “Superior” y el vino de don Gumersindo Pavón. Verdaderas fiestas del barrio.
El Voltejeo, el paseo por la bahía, la auténtica fiesta del mar de los campechanos desapareció; hoy este festejo solo es recuerdo de quienes vivieron, bailaron y disfrutaron de los recorridos por el mar y de la música en las murallas y en cada casa de todos los Juanes.
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